La primera vez que lo leí: Crónica del pájaro que da vueltas al mundo, me atrajo el título metafórico del libro. El escritor japones no deja a nadie indiferente, conozco gente que no le gusta nada y a otros como yo, les engancha. Crónica del pájaro es un libro extenso pero que no puedes dejar de leer, y no porque la historia en sí enganche o tengas que esperar al final para saber su desenlace. Es por la peculiaridad del ambiente que crea su autor y la forma de contar historias donde confunde la realidad cotidiana con los sueños; una vez que estás dentro del libro, a veces uno no sabe donde se mueve ya que es imprevisible, es primordial ir con la mente abierta para leer a Murakami, porque despues de leerlo, a un se le quedan quedan retazos como de un gran sueño. Luego vino Kafka en la orilla, otra ida de olla cargada de imágenes oníricas y Tokio Blues, éste más cercano, terrenal (si es que algún libro de Murakami lo es) pero desgarrador igualmente. Al final, como siempre que se abusa de algo, tuve un atracón de imágenes surrealista, cultura japonesa, ideas de suicidio, pozos y melancolia que me llevó a no distinguir bien un libro del otro y tuve que parar y leer otras perlas de la literatura más cercanas. Pasado un periodo de desintoxición, he vuelto con Murakami, After dark es su último libro editado en España, de momento me parece inferior a los otros tres, pero lo que me pasa es que me gustó tanto en su momento, que ahora ya no existe el factor sorpresa.
Posiblemente antes del verano de 2010 se publique su ultimo exito editorial en Japón 1Q84, su obra más extensa (2 tomos) y según dicen, un guiño a Orwell. Veremos a donde nos lleva.
