viernes, 26 de agosto de 2011

Nuestra aventura canadiense (III)









Ya se termina el periplo americano. Ha estado muy bien, pero se echa de menos a la familia y amigos, ahora entiendo a la gente que vive lejos de su país.
Hemos estado unos días en NY, cogimos un avión desde Búffalo (USA) a unos 140 kms de donde estamos porque sale bastante más barato que desde Toronto, los transportes públicos son caros o malos, el tren es un borreguero infumable y el metro tiene pocas lineas y poco prácticas, tenemos unos amigos ingenieros españoles en Toronto construyendo lineas nuevas con la empresa FCC, que se ha adjudicado el concurso del metro, buena noticia. La gente es muy amable pero no muy sociable. No se come bien, nada bien, demasiada grasa y mantequilla, aunque los asiáticos están muy bien. Han copiado el estilo de vida americano, pero sin paro, no se ve gente sin trabajo, sería un buen país para empezar una nueva vida, el gobierno te ayuda si eres inmigrante y tienes un trabajo para entrar, si no has conseguido una oferta de trabajo es muy complicado que te den el visado. La muticulturalidad del país es alucinante. Si quieres conocer culturas aquí las tienes todas. Los japoneses han invertido aquí con varias compañías y el terremoto afectó a la economía canadiense. Se ven buenos coches, pero me ha llamado la atención que la mayoría de los coches son asiáticos y americanos, europeos sólo se ven las tres marías, Mercedes-Volkswagen(Audi)-BMW, del resto ni uno. Mucho Pick-up donde cargan de trastos que luego guardan en los garajes y que algunos venden los sábados cuando les sobra del garaje, lo tienen petao...y el sótano ya ni os cuento, para un peli de miedo. Si quieres ir de compras existen algunos outlet con buenas gangas en marcas como Tommy, Guess, Levis, etc. que además con el cambio $CAN-€ ayuda. A todo le aplican un impuesto (en algunos casos dos) que no ponen en el precio y cuando vas a pagar te llevas una sorpresa, pero aun así compensa. Según nos cuentan los invierno en esta parte del país son muy duros y existe mucha casa de campo y granja desperdigadas por aquí, si en verano no salen en invierno no recogen ni el correo.

domingo, 14 de agosto de 2011

Nuestra aventura canadiense (II)




Ya llevamos aquí casi tres semanas, hoy es sábado y la gente está en sus casas; o bien viendo la tele o en el backyard, que es el patio de atras, con alguna barbacoa. La gente no se relaciona mucho, pero es muy respetuosa. El país, en general es caro, lo que pasa es que con el cambio €-CAD salimos ganando, aun así el carro de la compra sale más caro que en España y si comes fuera, además tienes que dejar propina del 15% aprox. Eso sí, los camareros/as son muy simpáticos. Esta semana hemos subido un poco para el Norte, sólo unos 250 kms, no me fío mucho del coche que nos han dejado. Las carreteras son buenas, el firme no es como en España, pero con inviernos tan duros es normal que no sea una alfombra, tiene autovías y unas pocas autopistas de pago. La zona del norte es más salvaje y menos poblada. Los fines de semana la gente de Toronto coge la canoa, la bici y el pick up, aquí todo el mundo tiene al menos dos coches, y se sube a los lagos (Algonquin y Muskoka) a pasar un fin de semana en plena naturaleza. Ayer estuvimos en un lago muy bonito donde había carteles de que se habían visto osos, por suerte nosotros no los vimos, pero esto es gigante y pueden vivir en cualquier parte. Cualquier intento de compartir una jornada en plena naturaleza, normalmente lo tienes que pagar, a no ser que te aventures por cualquier camino, la vegetación es tan espesa que necesitarías un hacha, los trails marcados normalmente pertenecen a grandes Áreas de conservación y tienes que pagar peaje. Por eso no ves casi a nadie caminando o ciclando por ellos. El jueves me quité el mono de bici, alquilé una Norco en un mini bike park y estuve toda la mañana haciendo remontes. Os dejo alguna foto más.