lunes, 21 de octubre de 2013

Paraiso encontrado

Había oído hablar de la Sierra de Guara, enclavada en el prepirineo oscense, es famosa por sus cañones para hacer barranquismo, lo que no sabía es que también era un paraiso para el mtb, estuvimos en la zona norte, menos conocida, cercana al pueblo Nocito, donde tuvimos nuestro centro de reclutamiento (Albergue La Mallata) frente al majestuoso Tozal de Guara con 2.000 metros de altura. Pero ojito, no es una zona para rutas con bicis de rallye de 10 kilos de peso. En Guara las rutas son mayúsculas, y las piedras más, las piedras son endureras 100%. Pistas hay pocas, y carreteras una, pero eso sí, multitud de senderos técnicos de subida y de bajada para gozar, aprender y si no estas en forma, reventar. Prácticamente no existe un llano y los desniveles al final del día hacen que cualquier GPS se vuelva loco. Un paraíso cruzado por riachuelos y pozas con aguas cristalinas, que invitan al baño si no fuera porque estamos en otoño.
Tuvimos suerte con el clima, sólo nos llovió cuando terminamos la ruta del sábado.
Además del lugar, destacar a los amigos. Las rutas, como siempre, no hubieran sido lo mismo sin nuestros compañeros de la Vieja Tronca: navarros, vascos, aragoneses y algún catalán, que nos enseñaron aquél pedacito de paraíso que quedará para siempre velado en nuestras retinas, y tampoco sin los intermedios para el bocata, y sin la tertulia y las risas tras las rutas, acompañadas de un buen jamón y una cervezas.