Para los que la vivimos de cerca la Justicia y para el ciudadano de a pie, ésta debe ser una institución que nos dé seguridad, felicidad y orden a todos. El problema viene cuando se convierte en todo lo contrario y debido a su mal funcionamiento nos quitan nuestros bienes, nuestra salud o la vida de nuestros hijos. El caso de la niña de Huelva, por desgracia, ha servido como siempre para que pongamos el grito en el cielo, nos escandalicemos y salga a la luz un problema que viene de lejos y además se ha enquistado. El pésimo funcionamiento de la Justicia, no me cabe duda de que la mayoría de Jueces están capacitados para impartirla. El problema es otro. Los plazos para resolver cualquier diligencia judicial se está ampliando “peligrosamente”, por no hablar de las dilaciones en resolver los Recursos planteados ante altos organismos judiciales. Aquí en España tenemos una característica peculiar a la hora de funcionar: vamos a salto de mata (el barco navega, pero parece uno de esos que cada cierto tiempo naufraga cerca de África porque iban 1000 pasajeros donde cabían 400) y afecta a temas que de verdad nos conciernen directamente: La educación se imparte en barracones, en los Hospitales se atiende en los pasillos y algunos criminales como el pederasta que deberían estar en la cárcel, andan sueltos (hoy mismo he leído que el Supremo ha absuelto a un GRAPO asesino por una serie de errores en la instrucción judicial) Otro problema que surge en nuestro querido país, es que tenemos la mezquina virtud de no reconocer nuestro errores, y lo digo a la hora de buscar responsables en el tema de la niña Onubense. El único cuerdo y sensato es el pobre padre, que es para que estuviera loco con lo que le ha pasado al pobre hombre.
En muchas zonas de España, el crecimiento demográfico y la naturaleza de las relaciones humanas junto con las carencias judiciales mostradas, han llevado a llenar de papel y colapsar algunos juzgados, saturación que como ya he dicho se ha enquistado. Donde yo trabajo existen verdaderos dislates: Existen juzgados colapsados donde después de 5 meses de presentar un desahucio por impago ni siquiera se ha abierto el expediente, me imagino que estará durmiendo el sueño de los injustos en alguna mesa (cuando no escalera) de algún funcionario y mientras el inquilino moroso estará descojonado.
La Justicia está falta de una reforma a fondo para que se vuelva fiable y eficiente y no de meros parches, la legislación necesita ser más eficaz a la hora de aplicarse sobre todo en el ámbito penal que recordamos, tenemos una legislación del siglo XIX, asimismo faltan medios físicos, técnicos y policiales, escasean los jueces, fiscales, psicólogos y forenses. Todo esto lo tienen que resolver los políticos con un gran Pacto por la Justicia, pero como siempre no están por la labor, todos quieren arrimar el ascua a su sardina y no se ponen de acuerdo ni en la reforma del propio C.G.P.J.
Hago una reflexión que me afecta: ¿De quien es la culpa de que el plazo del pago a los abogados del Turno de oficio en la Comunidad Valenciana se haya ido ampliando hasta llegar a los cinco meses de retraso actuales?
Habría que mirar hacia arriba, aunque quizás La Copa América, Terra Mítica, Julio Iglesias, etc., o la futura F1 no nos dejen ver.
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